Por primera vez desde que se realiza la muestra, la organización premió a dos vehículos.
La 23ª edición de Autoclásica sorprendió a los medios y al público asistente cuando al momento de premiar el Best of Show se anunció que no habría un ganador, sino dos. La justificación de la polémica decisión se basó en la celebración del 60 aniversario del Club de Automóviles Clásicos de la República Argentina, entidad que organiza el evento.
El criterio utilizado fue desdoblar el premio mayor en dos categorías: elegancia y sport.
En el primer caso, el ganador resultó un Rolls-Royce Phantom III de 1937, unidad que pertenece y fue restaurada por el Museo del Automóvil de Buenos Aires.
En la categoría sport fue reconocido un Shelby Cobra Daytona Coupé de 1965, vehículo que perteneció a la colección de Jorge “Goyo” Pérez Companc.

