Presente en el mercado argentino desde mediados del año pasado, la nueva generación del Chevrolet Montana marcó un punto de ruptura con todas las precedentes.
Por primera vez, la pick up compacta de Chevrolet cortó el cordón umbilical con los autos de pasajeros para desarrollar una verdadera configuración de pick up. Y no solo eso. Además, fue concebida acorde a la tendencia de estos tiempos con una carrocería de doble cabina y cuatro puertas que la habilita para interpretar dualidad de roles: utilitario y familiar. Es decir, es un vehículo tanto de carga como de pasajeros.
Fabricada y diseñada en Brasil, la nueva Montana fue lanzada comercialmente en Argentina en julio de 2023, aunque de manera anticipada se la pudo apreciar en la edición 2023 de ExpoAgro realizada en marzo de ese año.
La nueva Chevrolet Montana comparte plataforma con los modelos globales de la marca como Onix, Onix Plus y Tracker. En nuestro país se la ofrece en tres versiones, dos tope de gama, LTZ y Premier, y una de entrada de gama, LT, con caja de velocidades manual y recientemente presentada.
La unidad que probamos corresponde a la versión Premier, la denominación con la que Chevrolet identifica el mayor nivel de equipamiento. Está impulsada por un motor tricilindrico naftero Turbo Flex de 1.200 cc que eroga 133 hp y ofrece un torque de 210 Nm. La motorización se acopla a una caja automática de seis velocidades, mientras que la tracción es delantera.
Diseño en modo pick up
El diseño de la Montana hereda los rasgos estilísticos de los modelos con los que comparte plataforma, pero da un paso evolutivo al mismo tiempo que los reinterpreta en lenguaje de pick up. El frontal refuerza la identidad de los Chevrolet contemporáneos. La grilla gana en protagonismo con una superficie amplia y tres barras ensanchadas en sus extremos con terminación cromada. Una abertura por debajo y otra por arriba ayudan a refrigerar el propulsor y a enriquecer visualmente el frontal. La abertura superior aloja en su centro el tradicional logo que incrementó sus dimensiones en relación al de los autos de pasajeros. Bordea esta abertura una ornamentación en terminación cromada y en sus extremos se ubican las luces diurnas (DRL). Por debajo, el grupo óptico se completa con las luces de carretera y giro integradas.
El lateral se presenta sobrio sin las exageraciones y arbitrariedades de otros modelos de la marca como el Onix o la Tracker. Esta sobriedad no implica pasividad, el lateral sugiere una sutil musculatura con una zona central que tiende a reducirse y guardabarros que se ensanchan a la altura de los pasa-ruedas. La línea de cintura fluye paralela al plano del piso hasta tres cuartos de la ventanilla trasera, donde se interrumpe con un quiebre ascendente que determina la altura de la caja de carga. La línea del capó se proyecta paralela al plano del piso y recién se quiebra levemente hacia la trompa. El marco de la barra antivuelco extiende visualmente la cabina y su inclinación le aporta un mayor dinamismo.
Una moldura plástica que se continua por los pasa ruedas ofrece protección en las zonas bajas de las puertas a la vez que se conjuga armónicamente con el resto. Un estribo recubierto en plástico duro, texturado y engamado con las molduras se prolonga de arco a arco para facilitar el acceso al habitáculo. Para reforzar la personalidad del lateral, la Montana calza llantas de 17” oscurecidas en el centro. Las barras de techo en terminación aluminio satinado en la zona central completan el estilo.
En la parte posterior, las luces se ubican en la parte superior y se integran con un aplique en plástico negro brillante que a su vez copia la moldura del portón. La palabra “Chevrolet” va estampada sobre el portón y su visibilidad se refuerza con una tipografía cromada. Los paragolpes se angostan en la zona central para facilitar la apertura de la tapa y el acceso a la caja de carga
Funcionalidad y confort
Uno de los ítems destacados de la nueva Montana es la caja de carga “Multi-Flex”, con 8 ganchos de amarre e iluminación en ambos laterales. Las dos versiones que comercializa GM en Argentina incluyen de serie lona marítima, pero esta unidad que probamos estaba equipada con una tapa rígida enrollable y retráctil comandada a control remoto. Si bien esta opción simplifica la siempre engorrosa tarea de apertura y cierre, lo hace a costa de sacrificar unos 20 cm sin descubrir -necesarios para alojar el mecanismo y la tapa enrollada-, que limita la capacidad de carga de elementos que tengan una altura superior. La tapa es totalmente estanca al agua, nos tocó un viaje intensamente lluvioso sin que entrara una sola gota. Tampoco registramos ingreso de polvo en caminos no asfaltados por los que transitamos. Con la tapa cerrada, la caja se comporta como un enorme baúl con una capacidad de 874 litros. La capacidad de carga es de casi 600 kilos. Opcionalmente, puede equiparse con separadores “Multi-Board” que permiten distribuir y configurar el espacio en función de lo que se transporte.
La oferta de colores para lucir la carrocería está limitada a 5 opciones: Shark Skin Silver, Summit White, Cannon Green, Chili Red Pearlescent y Darkmoon Blue, este último tono corresponde a la unidad probada.
El acceso al habitáculo se facilita con los estribos. El interior es espacioso, alto y con multiplicidad de espacios para guardar objetos. El panel de instrumentos de lectura analógica nos remite al Onix y Tracker, pero con una mayor y mejor integración con la pantalla LCD de 8” del infotainment. Tanto la pantalla, como las salidas de ventilación y la consola central están orientadas hacia el conductor. Volante, asientos y sectores de los paneles de puerta y de instrumentos están tapizados con cuero Jet Black que le brinda un aspecto más lujoso. El volante multifunción está aplanado en la zona inferior para facilitar el ingreso y egreso del conductor. La Montana dispone de 6 parlantes, 4 de ellos alojados en los paneles de puerta.
La posición de manejo y la altura del vehículo otorgan un gran campo visual. La luneta es amplia, pero el travesaño de la barra antivuelco, ubicado en la mitad, limita mucho la visibilidad hacia atrás. Los asientos traseros disponen de espacio para tres ocupantes y una buena distancia entre el banco el respaldo de las butacas.
El equipamiento incluye la mencionada pantalla táctil compatible con Android Auto y Apple CarPlay, funciones de radio AM/FM, Audio Streaming, Bluetooth para hasta 2 celulares simultáneamente y entradas USB para ocupantes de plazas delanteras y traseras.
En materia de seguridad, la nueva Montana incluye 6 airbags, control de estabilidad y tracción, asistencia en frenado en urgencia, e indicador de punto ciego (exclusivo de la Premier), entre otros ítems.
Impresiones de manejo
Arrancamos con un susto menor. El sensor de presión de neumáticos se encendió a los pocos kilómetros de haber retirado la Montana de la agencia y camino al garaje. Por desconfianza a los manómetros de las estaciones de servicio, lo llevé a una gomería de confianza. Luego de calibrar los 4 neumáticos, el “gomero” me dijo: “te lo va a seguir marcando, probala unas cuadras y cuando se reconfigure el sistema se apaga”. Dudé, pero no tenía más opciones. Así como estaba, la guardé en el garaje. Al día siguiente, arranqué temprano para Mar del Plata. El testigo seguía marcando el mismo problema, pero a simple vista todo se veía bien. Volví a confiar en el gomero esperando que a las pocas cuadras se apague pero no ocurrió. Medí la presión en una estación de servicio y estaban correctas. Seguí viaje confiando en lo que veía y en el manómetro de la estación de servicio. Al final, el “gomero” tenía razón: el sensor finalmente se apagó, pero las pocas cuadras resultaron unos 300 kilómetros…De ahí en más, ninguna alarma más y a disfrutar del viaje y de la prueba.
El motor pareciera un tanto justo. Empuja lo necesario, es de reacción lenta, aunque obviamente no se pretende de un utilitario respuestas compatibles con las de un auto de pasajeros. Lo probamos sin carga, con lo cual estimamos que será más perezoso en otras condiciones de uso más exigentes. Por encima de las 1.500 rpm se escucha el ronroneo del tres cilindros turbo. Es más sutil que intenso, pero se deja oír y resulta “musicalmente” agradable. Según la condición de marcha y el tipo de terreno, la posición manual de la caja de cambios nos permite buscar una relación más acorde.
Los valores de consumo resultaron superiores a los del Onix y Tracker, pero razonables para un utilitario de mayor porte y peso. En ruta, la Montana promedió los 14,3 km por litro, en tanto que el consumo urbano arrojó 9,8 km/litro.
Con un diseño actual y específico de pick up, completo equipamiento en materia de seguridad y tecnología, excelente capacidad de carga e interesantes soluciones funcionales, la nueva generación de la Chevrolet Montana se posiciona como un jugador fuerte en el mercado de las pick ups de media tonelada.